El Precio de las Copas
En
el último informe de DASLA (Datos
Abiertos San Lorenzo de Almagro), analizamos
el mercado de pases, condiciones de altas, bajas, su valor y trasferencias.
En
esta oportunidad y con la intención de seguir fomentando una administración de Modelo de Gobierno Abierto en Identidad Sanlorencista mostraremos los
ingresos que generan las competencias, desde lo nacional, hasta lo
internacional y un bonus track que contextualiza al mercado europeo, con el
objetivo de seguir promoviendo la participación social y un mayor compromiso
por fuera del resultado del deporte más importante del club, el futbol
profesional.
Para ello, investigamos cuánto dinero recibiríamos con
valores actuales, por cada competencia que tenemos posibilidad de participar. El detalle por cada etapa
disputada, en el acumulado según el avance y hasta el premio mayor en el
posible caso de coronar el título.
San Lorenzo debe aspirar a salir campeón en todas
ellas, para estar a la altura de su historia, de su gente, volver a ser
competitivos, respetados y erradicar el estigma “de los milagros” que no hace
más que quitarnos grandeza. ¿Lo pensaste? Es una frase seductora, aplica para
el apodo de santos, a la figura del Padre Massa o el Papa Francisco, pero no es
algo positivo. Implica que la victoria no se da por la tenacidad y juego de
nuestro equipo, que da lo mismo el apoyo en la tribuna, dado que el resultado
es gracias a una acción sobrenatural.
Tenemos que volver a Av La Plata, no solo
físicamente con la construcción del estadio, sino también y por sobre todo, de
forma moral para volver a ser el club modelo del país. Es una obligación dar
cátedra de fútbol. Recordemos que, en promedio, allá por 1946 se gritaban tres
goles por partido, cuando Farro, Pontoni, Martino lograron 90 goles en 30
encuentros. Esa delantera y todo el equipo un año después, en la gira por
Europa, goleo dos veces al seleccionado español: 6 a 1 en el Estadio Metropolitano
de Madrid (la casa del Aleti, o sea lo que luego fue el Vicente Calderón y hoy
es el Wanda Metropolitano) y 7 a 5 en el Estadio Les Corts de Barcelona
(antecesor del actual Nou Camp); a la Selección de Portugal 10 a 4, en el
Estadio Nacional de Lisboa (que aún existe).
Somos Matadores, no milagrosos. Quien nos
enfrentaba en 1968, de arranque sabía que perdía, sin importar el esfuerzo, el
equipo en el segundo tiempo obtenía la victoria. Para ponerlo en fines
prácticos, deberíamos imponer el mismo respeto que generamos y sentimos cuando
jugamos contra Boca o Huracán, pero contra cualquier rival.
Desde luego no será un hecho salir campeón de todo,
incluso algunas copas son incompatibles jugarlas en simultaneo, además el
futbol es un juego y lo atrapante es que iguala y que cualquiera tiene la
posibilidad de ganar, haciendo referencia a la mentalidad ganadora que debemos
recuperar.
Retomando el informe, empezamos por lo nacional.
Además del torneo local y por ser parte de la primera división, tenemos la copa
argentina. En caso de conquistar cualquiera de los dos, además, tenemos la
posibilidad de jugar la supercopa.
En ambos casos, si bien el cheque es en pesos,
tuvimos que convertirlo a dólares, dado que el futbol se mide en esta moneda,
tanto desde el mercado de pases, como en las copas internacionales y es
incompatible por la fluctuante inflacionaria expresarlo en moneda nacional.
Como podemos observar, obtener el título suma
vitrina, pero como ingreso, es bajo comparado al pase de cualquier jugador y no
estamos contemplando en dichos montos, como a lo largo de todo el informe,
deducciones o el porcentaje que se destina hacia el plantel. Siempre se dice
que es la mitad lo que se reparte para los futbolistas participes, pero como
desconocemos dicha ecuación, dejamos el número limpio.
Pasando al ámbito internacional, nuestras
posibilidades son la copa sudamericana o la copa libertadores, dependiendo si
conquistamos los títulos nacionales anteriormente mencionados o el puesto que
obtengamos en la tabla de la máxima categoría.
De pronto, observamos que, monetariamente, salir
tercero en la sudamericana, es menos a participar en la fase de grupos de la
libertadores. Desde ya una tiene más peso que la otra, por los puestos de los
clasificados, por la chance de jugar el mundial de clubes, de allí la rosca y
la importancia que se le da a una sobre la otra, pero a fines netamente
presupuestarios, la sudamericana destina a su final $6MM de dólares (entre
ambos participantes) y de igual modo en dicha fase, la libertadores destina el
triple, otorgando $20 MM a repartir en los finalistas. ¿Podemos decir que 3
sudamericanas equivalen a 1 libertadores? A fines de vidriera, ambas son un
título internacional, pero el cheque debajo de la gloria tiene otro impacto
De una forma u otra, salir campeón de cualquiera de
ellas, nos posiciona en la recopa sudamericana, otro título internacional
para el contador, pero muchísimo más rápido, al ser un partido de ida y vuelta.
Este deja en las arcas del subcampeón, un jugador promedio a préstamo con cargo
en el próximo mercado de pases, pero para el campeón, el monto acumulado de
conquistar el primer puesto de casi 6 copas argentinas.
Párrafo aparte para el mundial de clubes, el máximo
título futbolístico, aunque salir campeón es tres veces menor a ganar la copa
que nos clasifica al mismo.
Como bonus track, sumamos una copa que no
podemos disputar, pero que nos da un contexto de los valores que se manejan en
Europa y algunas conclusiones al respecto.
La primera entendemos un poco más, al estar
incluso expresados en euros, la poca importancia que le dan a su participación
los equipos del viejo continente o porque no lo compiten con la misma
intensidad que en la competencia. También podemos deducir porque desde FIFA
desean cambiar el formato y su frecuencia a 4 años (como el mundial de
selecciones) y aumentar su valor, seducir más a los equipos europeos a
participar y que sea más competitivo. O hasta por qué, intentaron hacer una liga
paralela y sectorizar las remuneraciones en menos equipos.
La segunda es la enorme diferencia entre el
presupuesto de un equipo sudamericano y el presupuesto de un equipo europeo y la tercera en consecuencia, quizás entender porque tenemos tanta deserción a nivel local,
cuando la mayor parte de los futbolistas aspira a jugar en el viejo continente
a permanecer en Argentina y sus equipos formadores llevando su jerarquía a
dicha liga por una remuneración muchísimo mayor.
Por otro lado quizás, contemplando el número frio,
encontramos respuesta al negocio que viene ganando por sobre cualquier otra
postura o política, cuando se venden jugadores que aún no se consolidaron a
nivel club como ídolos, ni a nivel local como figuras y por qué juegan o son
titulares nombres que generan una rotación no competitiva.
Por último, mostramos los datos que refleja nuestro
balance, las participaciones de los últimos años en copas internacionales y
ponemos en valor nuestra cuota social, dado que es nuestro mayor ingreso
institucional. ¿Con qué fin? Comprender que por ejemplo, ganar la libertadores
es triplicar nuestro mayor ingreso y no sólo está la compra de entradas detrás,
también aumentaría la cantidad de socios, los sponsors, la publicidad, la
remuneración por ingresos de tv y el valor de nuestros activos intangibles (los
jugadores). Este último año sufrimos un aumento en la cuota social en un momento
difícil, más allá de que arrastraba un atraso. En lo personal, me imagino
mantener una cuota por debajo del promedio, accesible, para no solo ganar
cantidad de socios y evitar moras o bajas, sino para costear al futbol, con los
ingresos del fútbol.
El valor de la copas, más allá de la consagración y
la gloria, el peso de su precio en los ingresos para la tesorería del club.
Adrián Magnoni - Martín Saiz - Juan Pablo Fantino
Lindo analisis, para conocer lo que nos cuesta no participar de cada evento internacional sobre todo.
ResponderBorrarPara poder gestionar un buen plantel de futbol, autosustentable, es inadmisible no clasificar a la Copa Libertadores y para eso hay que jugar cada partido de liga con la misma seriedad que un clasico o un partido definitorio, porque quedar afuera de dicha copa por no afrontar las encuentros de liga de la mejor manera es algo inadmisible para mantener equipos competitivos sin dañar la economia del club. No se pueden "guardar" jugadores para encuentros de copa por sobre los encuentros de liga; y si se debe realizar, que sea incluyendo cierta cantidad de juveniles, tanto para que tengan rodaje y sean un buen recambio como para ponerlos en valor y pensar en una venta futura que ayude a mantener el nivel competitivo del equipo.
Este informe nos da mas informacion, sobre lo que estamos sacrificando, por "cuidar" jugadores, cuando estos son profesionales y se entrenan toda la semana para disputar 2 partidos a la semana.
Gracias Identidad!!!
Muchas gracias (por y como siempre) leernos y compartir tus reflexiones!! Es una alegría saber que fue enriquecedor el análisis.
ResponderBorrarAgrego: Además de estar preparados para dos partidos, esta la ecuación que desconocemos, la de cuanto se reparte en el plantel de cada fase expuesta (eso es doble también) "Guardar jugadores" es resignar competitividad. Experimentos o campañas sin planificación en el plantel, altas de edad fuera del promedio, falta de identidad de juego, es regalar la grandeza y descuidar la economía del club